Muchas personas consideran que poner límites a los niños
en algo que se sale de la comprensión que posee, las fallas por lo
general, están en la creencia de los padres a minimizar las acciones y a
subestimar la capacidad de los niños a entender lo que se les está
pidiendo.
Si bien no todos los niños son
desobedientes, la mayoría de ellos, tiende a serlo, sin embargo es
importante que como padres no ignoremos esto y aprendamos a poner límites a nuestros hijos.
Muchos padres nos han preguntado cómo es
posible realizar esto, o nos han hablado acerca de la desobediencia que
muestran sus hijos, por esto queremos ofrecerte estas recomendaciones.
Todo Comienza Desde Casa: Seamos Espejo.
Cuando hablamos de ser un espejo nos
referimos especialmente en el ejemplo. Como padres no podemos exigir el
cumplimiento de normas, o poner límites a nuestros hijos cuando nosotros mismos no cumplimos con las reglas o no damos ejemplo.
Los expertos mencionan que la mejor
forma de hacer que los niños aprendan sobre normas y límites es desde
que son bebés, también el entorno y el ejemplo que les damos, les
permite crear una idea sobre las normas no ajena sino como parte de su
desarrollo. Así que antes de mencionar los consejos, este es el punto de
partida más importante.
4 Recomendaciones para Poner Límites a Nuestros Hijos.
Dentro de los consejos que te ofrecemos, encontramos los siguientes dados por muchos expertos:
- Ser específicos: los niños no comprenden el significado de bueno o malo, de mal o bien, eso se aprende con la enseñanza. Así que cuando no queramos que hagan algo o cuando queramos que pase lo contrario debemos ser directos. Si pintan las paredes, la idea es decirles que no queremos que pinten las paredes puesto que se dañan. Si queremos que se sienten bien en la mesa, debemos expresarlo y enseñarles cómo.
- Firmes: la firmeza no tiene nada que ver con la violencia, muchos padres creen que un niño les entenderá mejor solo porque gritan más. En realidad no es así. Los niños entienden perfectamente si utilizamos las palabras adecuadas, basta con utilizar un tono serio, seguro y palabras adecuadas y directas para que los niños obedezcan.
- Reconoce sus acciones positivas: dentro de las recomendaciones que debemos emplear para poner límites a nuestros hijos tenemos que la mayoría de las veces somos buenos para resaltar las acciones negativas en vez de las positivas. También cuando se porten bien o hagan las cosas bien, debemos aprender a elogiar estas acciones, esto reforzará más sus comportamientos de obediencia y de respeto.
- Siempre da un porque: los niños por lo general tienen la tendencia a cuestionar las órdenes de sus padres, los por qué nunca deben ser respondimos porque si, o porque yo digo, debe existir una razón de peso. Si ordenamos que arreglen su cuarto, debemos explicar por qué esto es importante.
Estos son algunos buenos consejos o recomendaciones que nos permitirán poner límites a nuestros hijos.
